Neus Buira. ¿Qué miras?

Fechas
Comisariado
Mònica Regàs
Lo extraordinario comienza en el momento en que me detengo1 En el pensamiento medieval, la cripta contenía la semilla de todos los posibles. Era el corazón magmático en el que las cosas nacían y se preparaban para subir a la nave de la iglesia y ser llamadas cosas. Un espacio sin prejuicios ni moral, ni siquiera forma, fuera de cierta imprecisión fetal agravada por la oscuridad. La imagen de la ecografía podría servirnos de referente actual de esta cripta. El Espai 13, como marco. Como materia, tenemos a los individuos de Neus Buira, 12 rostros que emergen de la negrura con el fin de buscar en ti o en mí o en él el modo de acceder a la luz. Es decir, de ser algo más que un rostro. (Bajan dos feligreses. Escondámonos, veamos qué dicen…) Feligrés 1 - ¿Me miras o en qué piensas? ¿Quién es esa artista que se ha atrevido a impugnar mi supremacía de espectador con tanta impertinencia? Veníamos a mirar, y he aquí que somos nosotros los observados… No con mal ojo, no, ni con malicia; más bien, sin gran interés, pero tampoco mostrando una franca indiferencia. Feligrés 2 - ¡A mí me perforan de arriba abajo! F1 - ¿Sabes qué? Me remueve cosas que no me gusta que me remuevan. ¡Y no me deja irme, caray! ¡Me recuerda a aquella vez en el Prado, cuando El niño de Vallecas, ese enano feísimo de Velázquez, se me quedó mirando fijamente con un aire tan burlón que tuve que arrancar a correr! Pero aquí todo es silencio. ¿Cómo provocar la palabra cuando la intensidad de la mirada te escarba las entrañas como una sonda de hospital? F2 - Los retratos me piden que me los trague y los vomite a continuación. Me reclaman que les preste el alma para poder rechazarla, en cuanto la hayan vaciado, y así conseguir su propia autonomía. ¿A qué estamos jugando? ¿Y si no funcionara cada vez? Me siento rodeado de tensiones invisibles… F1 - Jugamos a intercambiarnos las almas, ¿no lo comprendes? Si nos ponemos entre dos espejos colocados uno frente al otro, ¿cuál de los dos gana? F2 - Tenemos que buscar qué hay detrás del espejo. ¿Te acuerdas de Valéry? «Una obra de arte debería enseñarnos siempre que no hemos visto lo que vemos…, un artista moderno debe perder dos tercios de su tiempo intentando ver lo visible, y sobre todo no tratar de ver lo invisible».2 F1 - Es cierto. ¡Mira! ¿No ves ahora cómo hablan entre ellos? ¡Qué alboroto! ¿Y si todos ellos fueran yo mismo? F2 - Y tú, ¿quién eres? Mónica Regàs (El nombre debe ir a la izquierda, muy cerca del final del texto) Notas al pie de página: 1 «L’extraordinaire commence au moment où je m’arrête», Maurice Blanchot en L’arrêt de mort, col. «Imaginaires», n.º 15, Ed. Gallimard, París, 1948, p. 53. 2 Paul Valéry, Introduction à la méthode de Léonard de Vinci, col. «Folio Essais», Ed. Gallimard, París, 1957, p. 25-26.